En medio de la solemnidad, el arte y la tradición que caracterizan a la Cuaresma y Semana Santa en Guatemala, una imagen inesperada se ha robado el protagonismo en redes sociales. La fotografía de un perro caminando alegremente sobre una colorida alfombra de aserrín y pino en Sumpango, Sacatepéquez, se ha convertido en la más comentada y compartida de esta temporada.
El autor detrás de la ya famosa captura es el fotógrafo Orlando Rukal, quien publicó una galería en su perfil de Facebook sobre la procesión de Jesús Nazareno de la Dulce Mirada y la Santísima Virgen de Dolores del Templo San Agustín. En ella se aprecia la riqueza cultural del cortejo, las alfombras meticulosamente elaboradas y la devoción de los fieles. Sin embargo, fue la espontánea presencia de un perro lo que hizo que una de sus imágenes se volviera viral.
El can, con semblante alegre, aparece caminando despreocupadamente sobre la alfombra como si también participara del evento, ajeno a la solemnidad del momento pero aportando un toque de ternura y autenticidad. Usuarios en redes no tardaron en reaccionar, elogiando no solo la ternura del instante, sino la precisión del fotógrafo para captar el momento exacto que, sin planearlo, logró emocionar a miles.
En una época donde cada imagen busca contar una historia de fe y tradición, esta foto destaca por recordarnos que la belleza también está en lo inesperado. Gracias a la mirada sensible de Orlando Rukal y a la simpática aparición de este perro, la Cuaresma en Sumpango tendrá una imagen inolvidable que ya forma parte de la memoria colectiva. Porque a veces, el mejor instante no se planea… simplemente sucede.