La moda guatemalteca hizo historia en uno de los escenarios más importantes del mundo. La noche del 13 de septiembre, la Fashion Week de Nueva York 2025 se vistió de color, tradición y cultura con la presentación de la colección “Legado ancestral”, integrada por 14 conjuntos elaborados con textiles mayas cien por ciento artesanales.
Un legado que viaja a Nueva York
La participación estuvo a cargo de Textiles D la Rossa, quienes representaron el trabajo de artesanos provenientes de Sololá, Chiquimula, Totonicapán, San Juan Comalapa y San Antonio Aguas Calientes. Cada pieza, desde los hilos hasta los bordados, fue confeccionada a mano, mostrando la riqueza cultural y el valor artístico de la indumentaria maya.
Entre las prendas más admiradas destacaron los huipiles de Comalapa, reconocidos por sus colores tornasolados, detalles de perlas y bordados tradicionales que cautivaron a los asistentes de la pasarela.
Orgullo guatemalteco en la pasarela internacional
La invitación fue extendida por el reconocido diseñador Erik Rosete a la familia Sic, quienes lideran Textiles D la Rossa. Para Alexander Sic, gerente general, esta experiencia representa una oportunidad invaluable:
“Creo que esta es una oportunidad para que toda la cultura indígena guatemalteca pueda exponer la belleza de sus textiles, para ir a exponer y enaltecer nuestro trabajo artesanal en un lugar como Nueva York”.
El impacto no solo se sintió entre el público presente, sino también en miles de guatemaltecos que siguieron la transmisión oficial, vibrando de orgullo al ver cómo los textiles mayas brillaron con fuerza en la gran vitrina de la moda.
Inspiración para nuevas generaciones
Con esta visibilidad, los artesanos esperan motivar a las nuevas generaciones a valorar y portar la indumentaria maya tanto en Guatemala como en el extranjero. La participación en la Fashion Week consolida el camino para que los tejidos tradicionales se reconozcan como piezas de lujo, arte y herencia cultural.
La colección “Legado ancestral” no solo conquistó la pasarela de Nueva York, también reafirmó que la moda puede ser un puente entre la tradición y la modernidad. Cada puntada, cada color y cada diseño contó la historia de un pueblo que sigue vivo a través de sus tejidos. Guatemala brilló en la capital de la moda, y los textiles mayas se consagraron como verdaderas joyas culturales ante los ojos del mundo.