La Selección Nacional de Guatemala logró rescatar un empate 1-1 frente a Surinam en el Dr. Ir. Franklin Essed Stadion, en un duelo correspondiente a la jornada 3 de la Eliminatoria Concacaf rumbo al Mundial 2026. Aunque el resultado deja un sabor agridulce, la Azul y Blanco sigue con vida en su camino hacia la siguiente fase.
Un primer tiempo complicado para Guatemala
Desde el inicio del encuentro, Surinam impuso su ritmo con una posesión dominante y transiciones rápidas que complicaron a la defensa guatemalteca. El portero Nicolás Hagen fue clave al evitar la caída de su arco con una espectacular atajada al minuto 10, tras un potente remate de Richonell Margarett.
La lluvia y el terreno resbaladizo favorecieron al conjunto local, que buscó constantemente los espacios por las bandas. Pese a ello, Guatemala se reorganizó en la media cancha y logró controlar el balón por momentos, aunque sin generar peligro real. El primer tiempo concluyó sin goles, dejando el partido abierto para la segunda mitad.
Lom adelanta a Guatemala, pero Surinam empata en el cierre
En la segunda parte, la bicolor mostró una mejor versión. Con mayor orden y dinamismo, los dirigidos por Luis Fernando Tena comenzaron a llegar con más peligro. Al minuto 72, una jugada desde la derecha terminó con un centro de Robles que fue mal despejado por la defensa local, dejando a Darwin Lom listo para marcar con una espectacular pirueta. Con este tanto, Lom alcanzó su tercer gol en la eliminatoria y puso a Guatemala al frente.
Sin embargo, cuando parecía que la victoria era posible, Surinam encontró el empate en el tiempo añadido. Al minuto 93, tras un tiro de esquina mal rechazado, Virgil Misidjan aprovechó el rebote y envió el balón al fondo de la red, sellando el 1-1 definitivo.
Un punto que deja esperanza
Con este resultado, Guatemala suma un punto importante como visitante, pero también la sensación de haber dejado escapar una oportunidad valiosa. El equipo guatemalteco mostró entrega, orden y momentos de buen fútbol, aunque deberá mejorar la concentración defensiva en los minutos finales.
Ahora, la Azul y Blanco se prepara para su próximo desafío ante El Salvador, un encuentro clave para seguir soñando con el Mundial 2026.
La ilusión sigue viva. Guatemala demostró garra, compromiso y una fe intacta en su camino rumbo a la gran cita mundialista.

