El inclemente calor, con temperaturas que alcanzan los 40°C, sigue causando estragos en Guatemala, incluso con la llegada anticipada de la temporada de lluvias. Aunque mayo debería marcar el inicio de las precipitaciones, muchas áreas del país aún se enfrentan a altas temperaturas, lo que contribuye a un clima asfixiante.

El pasado fin de semana, Guatemala experimentó las temperaturas más elevadas de la temporada, con el termómetro alcanzando los 40 grados Celsius en Petén, marcando el inicio de una serie de días extremadamente cálidos en la región. Esta situación se suma al patrón de altas temperaturas que ha afectado al país en las últimas semanas.

Según las previsiones del Instituto de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh), este fenómeno de calor no muestra señales de disminuir pronto. En otros lugares como Zacapa y San Marcos, los termómetros también se elevaron, registrando temperaturas de 38 y 37 grados Celsius respectivamente, mientras que en Jutiapa se alcanzaron los 36 grados. Estas cifras remarcan la amplitud del impacto de esta ola de calor en todo el país.

De acuerdo con una investigación de meteorólogos que forman parte del Foro del Clima de Centroamérica, señalan que, en el caso de Guatemala, la temporada de lluvia que ingresa usualmente a mediados de mayo, se podría retrasar hasta junio.

Ante esta ola de calor sin precedentes, las autoridades han emitido advertencias para minimizar los riesgos. Se aconseja encarecidamente evitar la exposición directa al sol durante períodos prolongados y tomar medidas de precaución adecuadas para enfrentar estas condiciones extremas. Es esencial mantenerse hidratado, buscar sombra cuando sea posible y limitar la actividad física al aire libre en las horas más calurosas del día.