El arte guatemalteco se viste de gala con el reciente reconocimiento otorgado a Ernesto Boesche Rizo, quien se convierte en el primer centroamericano en recibir el prestigioso Premio Internacional Leonardo da Vinci. Este galardón, entregado por el Consejo Internacional de las Artes (CIA), una entidad aliada a las Naciones Unidas de las Artes y las Ciencias (UNOTA), reconoce su legado de más de seis décadas al servicio de la creatividad, la educación y el arte.

La emotiva ceremonia se celebró el martes 22 de abril de 2025 en el majestuoso Palacio Nacional de la Cultura, en Ciudad de Guatemala. El evento también contó con la presencia de Dania Aguirre y Lissy Vela, nombradas embajadoras vitalicias del CIA-UNOTA, reforzando la relevancia cultural de la ocasión.

El Premio Internacional Leonardo da Vinci no solo enaltece la excelencia artística, sino que honra a quienes, como Boesche, inspiran a través de su trabajo con impacto social. Esta distinción es otorgada a artistas, educadores, investigadores y visionarios de las artes plásticas que, con pasión y compromiso, elevan el arte como herramienta de transformación cultural.

Ernesto Boesche Rizo, nacido el 26 de febrero de 1936 en Salamá, Baja Verapaz, ha consagrado su vida al arte y la enseñanza. Su formación artística inició en la Escuela Nacional de Artes Plásticas (ENAP) y continuó en instituciones de renombre como la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y el Círculo de Bellas Artes de Madrid, España. A su regreso a Guatemala, se convirtió en un pilar fundamental en la formación de generaciones de artistas desde su cátedra en la ENAP, donde también ejerció como director por ocho años.

Conocido por su técnica en retrato a lápiz, así como por su versatilidad en óleo y crayón, Boesche ha dejado huella en museos, galerías y colecciones privadas, tanto dentro como fuera del país. A lo largo de su carrera, también ha contribuido con publicaciones que rescatan la memoria artística de Guatemala, entre ellas Canto de Nostalgia, donde narra sus vivencias personales y su visión del arte.

Con este nuevo reconocimiento internacional, Ernesto Boesche Rizo no solo escribe su nombre en la historia del arte, sino que enaltece el nombre de Guatemala y Centroamérica en el panorama cultural mundial. Su legado es una inspiración para nuevas generaciones de artistas, demostrando que la pasión, el talento y el compromiso pueden abrir las puertas de los escenarios más prestigiosos. Hoy, más que nunca, su lápiz continúa trazando historia.