1. Preparar el adobo: En una licuadora, mezcla el aceite de oliva, el vino blanco, el ajo, el orégano, el comino, la cúrcuma, el pimentón, la pimienta y el Sabrosador Continental de Gallina Criolla. Procesa bien hasta obtener una mezcla homogénea que será tu adobo.
2. Marinar el pollo: Coloca las fajas de pollo en un colador sobre un recipiente para drenar el exceso de líquido. Luego, añade el adobo y deja reposar durante una hora. Esto permitirá que las especias impregnen bien el pollo.
3. Cocinar el pollo: Calienta un sartén grande a fuego medio-alto y derrite las dos cucharadas de margarina. Añade las fajas de pollo y dora por ambos lados, volteando cada minuto para asegurar una cocción uniforme. Evita dejar el pollo mucho tiempo sin girar para evitar que se cocine de manera desigual. En aproximadamente 8 minutos, las fajas estarán doradas y listas para servir.
Tips para un mejor resultado
- Marinar adecuadamente: Dejar marinar el pollo en un colador ayuda a eliminar el exceso de líquido, lo que evita que se hierva en lugar de dorarse. Esto es crucial para obtener un pollo jugoso y bien dorado.
- Temperatura del sartén: Cocina a fuego medio-alto para asegurarte de que el pollo se dore bien sin quemarse. Si el fuego está demasiado bajo, el pollo puede terminar cocido pero sin ese dorado característico.
- Guarniciones ideales: Acompaña las fajas de pollo con vegetales salteados, puré de patatas o una ensalada fresca para completar una comida balanceada y nutritiva.